Hace un par de semanas me encuentro con un amigo del colegio, ya eran varios años los que no nos veíamos y, tengo que admitir, me costó un poco reconocerlo. Después de saludarlo con un “¡Como es! Hermanito tanto tiempo, ¿que es de tu vida?” como las normas protocolares dictan en dichos casos, intercambiamos una pequeña charla resumiendo los aspectos mas relevantes de nuestras vidas.
Los temas fueron varios, la familia, los amigos en común, información relevante con respecto a cada uno de ellos, resúmenes, biografías, chismes y demás. Entre tanto “popurrí” de temáticas lo que llamo la atención a mi querido amigo, y le causo curiosidad acompañada de un sinfín de preguntas fue en el momento que le comente que llevo casi tres años de relación con mi pareja, por alguna razón esta noticia lo sorprendió, no se si por el factor tiempo, o por el simple hecho de que yo tenga pareja, cosa que era bastante difícil en mi época de colegial. Las preguntas llegaron como si fuera el “concurso del saber” (donde uno responde la mayor cantidad de preguntas en el menor tiempo posible), una tras otra intente contestarle de la manera más breve, pero aun así el seguía preguntando, me pregunto cómo era ella, que características la destacan, como fue que se animo a estar con un demente como yo. Tengo que admitir que la etapa de la descripción fue la más difícil de explicar, las únicas palabras que salían de mi boca (y con un tono de tonto enamorado) fueron “es una chapaquita bella (Chapaca = mujer proveniente de Tarija-Bolivia)”. Inconforme con la breve explicación el curioso de mi amigo comenzó con otro bombardeo de preguntas, fue ahí cuando me di cuenta de lo útil que hubiera sido traer una fotografía de mi pareja, un retrato de ella en ese momento hubiera ahorrado unos buenos minutos de preguntas y respuestas. Lástima que a ella no le guste que le tomen fotografías, algo bastante complicado tomando en cuenta que yo me dedico a la fotografía.
Luego de despedirme de dicha amistad, pensé que sería bueno realizar una serie de artículos dedicados al retrato fotográfico, ya hace algunas semanas subí algunos retratos tomados por Walker Evans en la década de los 70, así que me pareció prudente seguir con esa temática. Un retrato es la descripción de quien se encuentra en él, tiene el deber de mostrarnos sus rasgos físicos y su personalidad. El trabajo de un fotógrafo esta en lograr describir de manera correcta a esta persona según su percepción, él es quien decide como presentará a todo aquel que vea la fotografía.
En la siguiente serie de artículos, pequeños pero artículos al fin, conoceremos varios personajes presentados por una selección de fotógrafos. Los invito a explorar estas fotografías y a ver estos personajes, salidos de la mente del fotógrafo, interpretaciones reales o maravillosas fantasía.

1 comentarios:

may-chan dijo...

Me parece muy interesante tu relato, llamaste la atención con una de tus vivencias, para luego entrar al tema del el foto-retrato y explicarlo brevemente =P

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